domingo, 8 de febrero de 2015



En el camino desolado y a una larga distancia me percato que  allá estaba, la sombra de la mujer que sollozaba, me  acerco con prudencia y enseguida ella salta, pues mi presencia no se esperaba, a nuestro lado una mariposa se quejaba, pues una de sus alas ya no estaba. En esa oruga, en esa oruga mencionaba, de qué habla me preguntaba... 

Acaso no lo sabes ! , antes era fuerte y nada me asustaba, pero desde que en mariposa me convertí , me he sentido vulnerable , llena de miedos, pues he tenido que volar por aquí y por allá sin camino fijo y hoy , justamente hoy que estaba desde lo más alto de un árbol y que decidida me encontraba , esa fulana me gritaba aquella águila!, aquella águila sigilosa viene en busca de una de tus alas, sin opción alguna deje que se la llevara y en esos momentos anhelaba mi otra parte , esa parte que en algún momento sentí que inútil en mi cuerpo se encontraba , pero ahora más que nunca prefiero ser una mariposa incompleta , con todo y sus defectos a haberme quedado como una oruga que jamás hubiera podido tener la posibilidad de volar , de arriesgarse y de por fin en estos momentos decir que pudo enfrentarse  a uno de sus  más  grandes temores , el haber sido atacada por un águila , pero de esto pudo sacar una conclusión , a veces tenemos que perder algo valioso de nosotros para encontrar la valentía que nos hacía falta para seguir adelante y para dejar de quejarnos de lo que hubiera podido hacer si no hubiera tomado dichas decisiones que me hicieron ser esta persona.
Si la mariposa oruga se hubiera quedado , muchas cosas no hubiera aprendido , pero la mariposa tuvo la oportunidad de haberse transformado y de haber contemplado una nueva perspectiva que la vida le presentaba, aunque el camino que debía de continuar no se visualizaba fácil a falta de su ala , ella decide continuar y esforzarse más de lo que antes le tocaba, pero va llena de ilusiones  y con ganas de seguir explorando muchas más cosas.